La Centuria: Reseña de la Centuria
La caída de los gigantes (2010), El invierno del mundo (2012) y El umbral de la eternidad (2014), es la trilogía escrita por Ken Follett conocida como La Centuria. Si tenemos curiosidad sobre la historia universal y las consecuencias de las decisiones que tomaron los grupos de poder, y que se hicieron en su momento por la continuidad de la supremacía establecida. Los grandes conflictos que ha padecido la humanidad han tenido como ingrediente principal el deseo del hombre de decidir, de tener el privilegio de dirigir a los otros seres humanos que están debajo de su estructura social y a los que están en su mismo nivel también. Leer a Ken Follett en su Centuria da todo un panorama de lo que se vivió antes, durante y después de los grandes conflictos bélicos, políticos y diplomáticos. Esta saga es una visión de la historia universal del siglo XX, historia transgresora, subversiva, turbulenta, pero también llena de esperanza y libertad. Los procesos históricos que se vivieron en este siglo conmocionaron de tal manera el equilibrio político, económico y sobre todo el social de los pueblos. El fondo histórico en que se enmarca los acontecimientos narrados en La Centuria es de gran veracidad, sus personajes tanto ficticios como históricos son reflejo de la época y definen muy bien las complejidades psicológicas como individuos y sociedad, sus idealismos y creencias políticas.
El escritor nos sitúa en cada momento histórico a través de las vivencias de 5 familias, disímiles entre sí, de diferentes clases sociales y formas distintas de vivir el momento: una inglesa, Fitzherbert; galesa, Williams; alemana, von Ulrich; americana, Dewar y rusa, los hermanos Peshkov.
En La caída de los gigantes, refiere como desde antes de iniciarse la Primera Guerra Mundial la sociedad daba los primeros pasos para la transformación, el mundo como se vivía hasta ese momento dejó de existir, cambió, transformó el orden del día. Lo cotidiano, lo doméstico, lo cultural, lo religioso, las relaciones sociales fueron mutando poco a poco. El orden establecido se trastocó, las clases sociales se diferenciaron mucho más y alteraron la visión de mundo que imperaba en ese momento. La Revolución Rusa es un ejemplo de esa alteración. El pueblo, obreros y campesinos, se impusieron sobre la tradicional aristocracia zarista cuando el desarraigo y las intolerables condiciones de vida abonaron el terreno para la revolución. Y quizás lo que ayudó en esos cambios fue la tenacidad de la mujer de exigir sus derechos, ya en el siglo XIX en Estados Unidos, la mujer había iniciado y logrado su derecho al voto; en Inglaterra, las sufragistas se hicieron sentir a través de sus protestas, manifestaciones y luego de la guerra les concedieron el derecho al voto.
Este primer libro detalla la cotidianidad de estas familias, donde están ubicadas geográficamente y a cuál escala social pertenecen, su manera de pensar y la forma como enfrentan el día a día. Los Williams, son la familia galesa, los hombres de la familia son mineros y algunos sindicalistas y las mujeres son amas de casa o pertenecen a las filas de sirvientes de la casa del conde. La inglesa pertenece a la nobleza, el conde Fiztherbert es el dueño de las minas y de parte de la región. Está casado con una princesa rusa y tiene un puesto en la Cámara de los Lores. Los hermanos Peshkov, es la familia rusa, obreros en la sociedad zarista con deseos de huir hacia Estados Unidos, pero solo uno lo conseguirá. Lev escapará y logrará el sueño americano y Grigori luchará en y por la revolución y conseguirá sobrevivir en ese caos. La familia alemana pertenece a la aristocracia, los von Ulrich. Son participantes activos de las circunstancias políticas y diplomáticas que llevaron a la Primera Guerra Mundial. Walter von Ulrich, protagoniza una historia de amor con Maud Fitzherbert que a pesar de la proximidad de la guerra, su consiguiente separación, el nacionalismo exacerbado de Inglaterra y Alemania logran llevar a feliz término. La familia estadounidense Dewar, Gus Dewar hijo de un senador que llega a trabajar con el presidente Woodrow Wilson y a través de él conocemos las situaciones que se dieron como preámbulo a la Primera Guerra Mundial.
El autor es concienzudo en las descripciones de las batallas, de la crueldad de los enfrentamientos, la muerte como compañía y la deshumanización que por momentos se vive y se siente al estar frente a frente con el enemigo. La evolución de los personajes es uno de los puntos brillantes de la historia, como ejemplo tenemos a Ethel, que pasa de ser ama de llaves de la casa del conde Fitzherbert a luchadora por los derechos de la mujer. A pesar de ser madre soltera y no tener ayuda, logra salir adelante y convertirse en una mujer sólida, con su idea de ayudar a otras mujeres en el campo laboral y lograr algún día el voto femenino.
En El invierno del mundo, la historia continúa y en este segundo libro aparece la siguiente generación de las familias que conocimos en el primer libro. Y es a través de ellos que atravesamos otro capítulo histórico: los inicios del fascismo, la vida en la Rusia comunista, la guerra civil española, la Segunda Guerra Mundial, los encuentros y desencuentros de la Casa Blanca.
El enlace que hace el autor entre un libro y otro es por medio de las familias, y como cada integrante nos asoma las contrariedades, las situaciones, las condiciones de vida que asumieron dentro de la época que les toca estar presente. En la primera parte del libro encontramos como el ascenso de Adolf Hitler es imparable. A través de la familia von Ulrich, opositores al Partido Nazi y por lo cual sufrirán las consecuencias, se registra la influencia del partido nazi y de todas las intimidaciones, la violencia de la que hicieron gala para mantenerse y ser el Poder. Los hijos de Walter y Maud son las dos caras de los residentes alemanes: Carla, subversiva y Eric, acólito. Uno de los hechos históricos que se narra y que Carla denuncia es sobre la Operación T4, cuenta las atrocidades y las desapariciones que cometieron con los enfermos terminales, los que padecían problemas mentales, los niños con discapacidades. Esto más la aniquilación de los homosexuales, y de todo aquello que no cumpliera con sus parámetros nazistas.
El nazismo se extiende poco a poco a otras naciones que simpatizan con la ideología. A la par de estos acontecimientos encontramos el avance del comunismo, otra ideología que logra un lugar en el pensamiento político de muchos, y al cual muchos jóvenes tomaron como referencia esta corriente y se involucraron y alistaron en la brigadas internacionales de voluntarios para luchar en la guerra civil española en contra de Francisco Franco. Lloyd Williams, activista político comprometido con sus ideales, es uno de estos jóvenes que llega luchar en España. Ethel, su madre gana un puesto en el parlamento.
En la familia inglesa a través del conde Fitzherbert, su esposa la princesa rusa Bea y sus hijos Boy y Andy ofrecen la perspectiva de la nobleza ante los acontecimientos de la preguerra. Boy casado con una norteamericana, Daisy Peshkov, coquetean con el nazismo y se involucran en manifestaciones donde se buscaba el enfrentamiento contra los otros. Posteriormente asumen su responsabilidad con su país y luchan contra Hitler en la guerra. Boy será un piloto de guerra y Daisy, chofer de ambulancias.
Los hermanos rusos vivieron sus vidas separadas sin saber nada uno del otro. Lev Peshkov es obligado a enlistarse a la guerra de la cual logra sobrevivir con astucia y su conocimiento de la lengua rusa. Grigori Peshkov, ha vivido cada una de las etapas de la revolución rusa y se ha mantenido a pesar de los reveses logrando consolidar su estatus militar y su matrimonio. Sus hijos Volodia y Ania les toca presenciar esta nueva etapa de la revolución rusa.
A través de los Dewar, conocemos los entresijos de la Casa Blanca con respecto a Europa y la Segunda Guerra Mundial. Los hijos de Gus Dewar: Woodrow y Charles se enlistan en la guerra, Woody, como oficial en el Regimiento Paracaidista del ejército de Estados Unidos y Chuck, como integrante de la unidad de señales de los servicios secretos.
Esta segunda parte retrata las circunstancias de la Segunda Guerra Mundial, guerra fratricida, cruel e inhumana que sacó lo peor y lo mejor de los hombres y mujeres que lucharon en ella. La situación vivida en Pearl Harbor y que dio lugar a la entrada de Estados Unidos a esta guerra es una de ellas y la otra, los acontecimientos que suscitaron el lanzamiento de la bomba atómica.
El tercer libro, El umbral de la eternidad, es el desenlace de esta extraordinaria historia. Los hijos y nietos de las familias coprotagonistas son quienes se pasean por las situaciones que se suceden después de la Segunda Guerra Mundial como el cambio de mentalidad que se dio en el mundo, que abarcó desde lo social, lo político, lo cultural, lo religioso. En lo social, se manifiesta un relajamiento de las normas sociales, la rebeldía ante lo establecido dio espacio a una mentalidad abierta con respecto a las relaciones personales. Políticamente siguen los enfrentamientos, primero diplomáticamente, pero luego se las ingenian para llevar a los conflictos a los extremos: la división de Berlín, la crisis de los misiles en Cuba, la guerra de Vietnam.
Y mientas los pueblos luchan, la sociedad sufre una transformación de 180°, surge el movimiento hippie, los gustos musicales de la juventud pasan de canciones protestas y ritmos como el rock; pero a su vez también aparecen gritos de libertad, en Estados Unidos se inicia el movimiento por los derechos individuales, los afroamericanos exigen ser visibles ante la sociedad igual que las mujeres.
Alemania se divide en dos: la República Federal Alemana amparada por los aliados en la parte occidental y la República Democrática Alemana custodiada por los rusos. A su vez, Berlín también es dividido por el Muro que separa a familias enteras y que tardaron en reencontrarse. Los von Ulrich quedan en la parte soviética y sufren en carne propia la falta de libertad. Maud, ahora viuda; Rebeca Franck, Walli Franck, y Lili Franck. Walli formará parte de la cultura underground de grupos de rock. Ante la falta de libertades y el acoso de la Stasi, Rebeca y Walli deciden huir.
En Estados Unidos, el nieto de Lev Peshkov; George, es un activista de los derechos individuales que lucha contra el racismo y logra entrar al exclusivo grupo de los Kennedy. A través de él conocemos los entresijos de la Operación Mangosta, la crisis de los misiles en Cuba, la muerte del presidente John Fitzgerald Kennedy.
Ursula/Beep Dewar, personifica la mujer que sigue sus instintos de vivir el día a día sin pensar en las consecuencias, se relacionará con Walli Franck y con Dave Williams. Su hermano, Cameron Dewar tiene una visión entre puritana e inflexible sobre la moralidad: política y social. Será partidario de los republicanos, admirador de Richard Nixon. Buscó ayudar a su país a través del espionaje en el extranjero. El hijo de Daisy y Lloyd Williams, Dave se hace músico y junto con Walli forman una banda que los hará famosos.
Los nietos de Grigori Peshkov, los mellizos Dvorkina se hacen sitio en el mundo soviético, aun cuando no estaban de acuerdo con el stalinismo y sus posteriores sucesores. Dimka consigue ser asesor del Secretario General del Partido y Tania, como periodista nos da otra visión de los acontecimientos tanto de lo que se vive en Rusia como en los países comunistas que visita.