La Centuria: Ambiente Histórico

Ambiente histórico. Los principales acontecimientos acaecidos en el siglo XX a través de las historias de las cinco familias: La Centuria narra lo que les tocó vivir a los personajes en cada episodio histórico.

LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL O LA GRAN GUERRA:

La Primera Guerra Mundial fue una confrontación bélica centrada en Europa que empezó en 1914 y finalizó en 1918, cuando Alemania aceptó las condiciones del armisticio. Recibió el calificativo de mundial porque se vieron involucradas todas las potencias industriales y militares de la época. Por un lado, la Triple Alianza formada por las Potencias Centrales: el Imperio alemán, Italia y Austria-Hungría. Por otro lado, se encontraba la Triple Entente, formada por el Reino Unido, Francia y el Imperio ruso. Se movilizaron y combatieron en el enfrentamiento más grande de la historia con más de 70 millones de militares, de los cuales 60 millones eran europeos. En este conflicto, se ven involucrados los personajes de la primera generación, pertenecientes a las cinco familias que son el hilo conductor en La trilogía The Century.

Desde que comenzó la contienda el ejército alemán cruzaba Bélgica como una exhalación. Al sur, los franceses habían invadido Lorena, y lo único que habían logrado era que los acribillase la artillería alemana. En ese momento, se batían en retirada total. Japón se había puesto del lado de los aliados británicos y franceses, que, habían liberado a los soldados rusos del frente de Extremo Oriente para enviarlos al campo de batalla europeo. Sin embargo, los estadounidenses ya habían confirmado su neutralidad, lo que supuso un gran alivio para Walter von Ulrich. Y, probablemente, Alemania tardaría otros dos años en ganar la guerra. Walter confiaba en que Rusia se derrumbara, lo que permitiría a los alemanes concentrar sus fuerzas en un ataque masivo definitivo hacia el oeste.

Grigori Serguéievich Peshkov en los últimos dos años, había matado a muchos hombres. Era sargento. En julio, el avance de los rusos se había ralentizado, por la falta de suministros. Cuando la ofensiva Brusílov llegó a un punto muerto, Grigori fue destinado a la capital. En cambio, Lev Peshkov no pensaba ir a la guerra, aunque Estados Unidos si había entrado en la confrontación. Su suegro lo obligó cuando descubrió su amorío. Al contrario, Augus Dewar se presentó voluntario. William Williams también se había presentado de voluntario con su mejor amigo Tommy Griffiths al 8.º Batallón de los Fusileros Galeses, donde el comandante era el conde Fitzherbert. Lev Peshkov viajaba en ese mismo tren, en que viajaba Billy. Trae la noticia que se había firmado un armisticio, y con él la formación de un nuevo mundo. Los aliados estaban negociando tratados de paz para los socios de Alemania: Austria, Hungría, Bulgaria y el Imperio otomano, creando nuevos países como Yugoslavia y Checoslovaquia, y repartiéndose Oriente Próximo en zonas británicas y francesas.

LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL:

El inicio del conflicto bélico no se debió a un único motivo, sino que surgió por un conjunto de factores. Uno de los más relevantes fueron las cláusulas del tratado de Versalles, que Alemania y sus aliados se vieron obligados a firmar: tenían que hacer frente a una deuda impagable con las potencias que habían salido victoriosas, perdieron el dominio sobre sus colonias africanas y no podían tener un ejército. Alemania había sido derrotada y humillada. La derrota de Alemania fue para muchos alemanes, incluyendo a Adolf Hitler, difícil de aceptar. En 1923, Hitler intentó una insurrección, tras cuyo fracaso fue condenado a cinco años de prisión. Liberado ocho meses después, en 1924, consiguió obtener creciente apoyo popular sirviéndose de su talento oratorio. Exaltaba el pangermanismo, el antisemitismo y el anticomunismo, apoyándose en la propaganda nazi y las concentraciones de masas.

Todo esto, lo llevó a ser nombrado canciller en enero de 1933. Después de la muerte del presidente Paul von Hindenburg, se autoproclamó Führer, asumiendo así el mando supremo del Estado germano. La primera medida de Hitler fue someter la prensa al gobierno. El presidente del Parlamento alemán era Hermann Göring, el colaborador más estrecho de Hitler. El primer asunto que debían tratar cuando se iniciara la sesión era la Ley de Habilitación, que permitiría que el gabinete de Hitler pudiera aprobar leyes sin el permiso del Reichstag. Convertiría a Hitler en un dictador y transformó la endeble República de Weimar en el III Reich, gobernado por el partido nazi. Alemania estaba transformada. Hitler había erradicado el desempleo. En los dos años anteriores, tanto Austria como Checoslovaquia habían sido anexionadas por la Gran Alemania, que era la potencia dominante de Europa. La Italia de Mussolini se había aliado con Alemania mediante el Pacto de Acero.

Cuando estalló la Guerra Civil en España, la política exterior de Hitler había sido una sucesión de éxitos. A mediados de 1936, el Tercer Reich estaba llevando a cabo un rearme obviando el Tratado de Versalles, por no hablar del servicio militar obligatorio, el abandono de la Sociedad de Naciones y la interrupción de los pagos de indemnizaciones que habían supuesto una carga para la República de Weimar. Hitler había logrado remilitarizar Renania sin que nadie le dijera nada. El ejército alemán había decidido enviar espías a España para hacerse pasar por voluntarios antifascistas a la espera de poder luchar junto al gobierno en la guerra civil. La Alemania fascista se preparaba para ayudar al régimen de Francisco Franco que estaba asesinando a los partidarios del gobierno electo por millares. Madrid había caído en manos de los rebeldes de Franco, y España tenía ahora un gobierno afín al fascismo. Del 37 al 39, Chamberlain había seguido insistiendo en la no intervención de Gran Bretaña y Francia, mientras que Alemania e Italia no hacían más que enviar armas y tropas al ejército rebelde, y los ultraconservadores estadounidenses vendían gasolina y camiones a los franquistas. Si había algún político británico culpable de los asesinatos en masa que estaba llevando a cabo Franco, ese era Neville Chamberlain, primer ministro del Reino Unido.

En este nuevo conflicto, se ven involucrados los personajes de la segunda generación, pertenecientes a las cinco familias protagonistas de La caída de los gigantes. Siguiendo el curso de los acontecimientos históricos vemos como Alemania da inició a la Segunda Guerra Mundial al invadir Polonia el 1 de septiembre de 1939. De ese año a 1940, Alemania obtuvo victorias relámpago una tras otra. Europa era fascista desde Polonia hasta Portugal. Ya no se libraban combates en ningún sitio. Se rumoreaba que el gobierno británico había negociado con los alemanes los términos del tratado de paz. Sin embargo, Winston Churchill no firmó la paz con Hitler, y ese verano estalló la Batalla de Inglaterra. Miles de personas habían salido de Londres. Los británicos habían repelido la amenaza de invasión, pero eran demasiado débiles para atacar a los alemanes en el continente europeo, a menos que los norteamericanos les ayudasen. Estados Unidos había entrado en la contienda con el ataque de Japón a Pearl Harbor. De igual forma, la segunda generación de las cinco familias también entran en la guerra. Ya Lloyd Williams se había ido a España a luchar contra los fascistas.

Después de que Hitler y Stalin firmasen el tratado, hacía casi dos años, conocido como Pacto Ribbentrop- Mólotov, el espionaje soviético había seguido activo en Alemania. Aunque los alemanes se habían aliado con los bolcheviques, Hitler traicionó el acuerdo y lanzó la invasión de la Unión Soviética. El trabajo de Volodia Peshkov consistía en recabar información militar secreta que ayudara a los soviéticos a ganar esa guerra. Volodia consiguió un documento. Era una copia de carbón que llevaba un encabezamiento: Directiva N.º 21: Operación Barbarroja. El texto comenzaba así: La Wehrmacht alemana debe estar preparada, antes incluso del fin de la guerra contra Gran Bretaña, para derrotar a la Unión Soviética en una rápida campaña. Al final del documento, vio una rúbrica: Adolf Hitler. El espía alemán Werner Franck estaba en lo cierto. Con el nombre en código Operación Barbarroja, que significó la apertura de un frente en el este, la Alemania nazi invadió la Unión Soviética, en lo que fue la operación militar alemana más grande de la Segunda Guerra Mundial. La invasión alemana a la URSS comenzó el 22 de junio de 1941 y el avance fue fulminante durante el verano. El temible ejército alemán, experto en la guerra relámpago, había llegado hasta las puertas de la ciudad. En consecuencia, el Ejército Rojo estaba sufriendo una auténtica sangría de hombres y equipamiento. No cabía duda de quién era el responsable. La Unión Soviética era una autocracia. Una sola persona tomaba las decisiones: Iósif Stalin. Los soldados soviéticos habían luchado como leones para salvar su capital y habían rechazado al ejército alemán a costa de la vida de 1.029.234 hombres.

No obstante, durante el año 1941 y gran parte de 1942 el Eje siguió teniendo la iniciativa. Tres batallas marcaron el cambio de signo de la guerra: Stalingrado en el frente oriental, Midway en el Pacífico y El Alamein en el norte de África. En Stalingrado, la ofensiva se conoce con el nombre en clave de Operación Azul. Empezó el 28 de junio. Volodia Peshkov había obtenido la información de la red de espías que Werner Franck tenía en Berlín. Comenzó en 1942 y finalizó en el 43. La Blitzkrieg (guerra relámpago) que se había paseado por Europa no funcionó en la inmensidad del territorio ruso. La capitulación del VI ejército alemán, supuso la mayor derrota sufrida hasta entonces por la Alemania nazi desde el inicio de la Segunda Guerra Mundial. Mientras tanto, los japoneses habían conseguido lo que querían: un imperio que les proporcionaba caucho, estaño y lo más importante, petróleo. Solo la armada de Estados Unidos les aguaba la fiesta. Los japoneses habían esperado destruir Pearl Harbor por completo y hacerse con el control total del océano Pacífico, pero no lo habían logrado. Sin embargo, el siguiente enfrentamiento era inminente. Sin duda, los japoneses esperaban sorprender en Midway y así, repetir la escena de Pearl Harbor, pero eso, gracias a los criptoanalistas, no sucedería. Chuck Dewar logró descifrar el ataque a Midway el 4 de junio. La totalidad de la batalla se había librado en el aire. Después de la batalla de Midway quedó claro que la guerra del Pacífico se ganaría lanzando aviones desde los barcos.

En la primavera de 1944, los ferroviarios empezaron a causar destrozos en la propia red. Volaban las vías e inutilizaban las enormes grúas destinadas a retirar los trenes siniestrados. Sin embargo, la campaña fue en aumento, y para el Día D el tráfico de trenes en algunas zonas de Francia había quedado interrumpido. El 6 de junio de 1944, conocido como el día D, los aliados iniciaron el desembarco de un ejército más de 150.000 soldados sobre las playas de Normandía. La invasión aliada de Francia había empezado. Ahora, una jornada después del Día D, Lloyd Williams se encontraba tendido en la cima de un terraplén, junto a la línea principal de Ruán, la capital de Normandía, en un punto donde la vía penetraba en un túnel. Era un tren de las tropas alemanas que trasladaba a más de mil hombres, entre oficiales y soldados, al campo de batalla de Normandía. El trabajo de Lloyd consistía en asegurarse que ni ese tren ni los siguientes cruzaran el túnel. Un avión británico seguía al tren. Una batería antiaérea lo derribó y el piloto murió. Era Boy Fitzherbert. Pero la misión de Lloyd se cumplió: No solo había matado a cientos de soldados enemigos y había inutilizado un tren, sino que también había bloqueado una importante línea ferroviaria. Fue la mayor invasión por tierra y agua de la historia. Durante los primeros cinco días de junio, el teniente Woody Dewar desembarcó en la primera etapa de la Operación Overlord, la invasión de la Europa ocupada por los nazis. Las fuerzas alemanas se retiraron al este a través del Sena el 30 de agosto de 1944, marcando el cierre de la Operación Overlord. Después de salir de Normandía a finales de julio de 1944 y de los desembarcos en el sur de Francia el 15 de agosto de 1944, los aliados avanzaron hacia Alemania más rápido de lo planeado. Para Alemania fue una herida de muerte que aceleró el final de la guerra en el Frente Occidental.

La batalla de las Ardenas fue una ofensiva alemana lanzada el 16 de diciembre de 1944 a través de la región de los países actuales de Bélgica y Luxemburgo. El avance a través de las Ardenas no había resultado la victoria fácil que los alemanes esperaban obtener. Las defensas del río Mosa eran débiles, pero los franceses contraatacaban con virulencia. Erik von Ulrich y su amigo Hermann Braun, en su unidad médica estaban en los densos bosques y montañas de Bélgica, donde se libró la batalla durante el invierno del 44-45. Fue la última gran ofensiva del ejército alemán en el frente occidental. El 25 de enero de 1945 los aliados derrotan a Alemania. Después ya no hubo más contraataques. Woody Dewar y otros miembros de la 101.ª División Aerotransportada habían resistido en Bastoña, una ciudad situada en una encrucijada de vital importancia. Lo habían herido a finales de 1944, en Bélgica, en la batalla de las Ardenas. Un poderoso contraataque alemán sorprendió a los Aliados que avanzaban hacia la frontera germana. Woody Dewar al caer herido a finales del 44, en Bélgica, en la batalla de las Ardenas, volvió a la vida civil. Hitler no se había rendido, aunque Ejército Rojo estaba a las puertas de Berlín. Le dice a su padre que: ´´los soviéticos han encontrado un campo de exterminio. Los nazis mataban allí a centenares de personas a diario. Un lugar llamado Auschwitz, en Polonia´´. Pág. 770. El invierno del mundo. Trilogía The Century 2.

El plan trazado por unos cuantos oficiales alemanes de asesinar a Hitler el 20 de julio de 1944, conocido como el Plan Valquiria había fallado. El ejército alemán se había batido en completa retirada en el frente oriental, y los Aliados habían tomado París en agosto, pero Hitler estaba decidido a luchar hasta el final costase lo que costase. La Batalla de Berlín conocida como la Caída de Berlín, fue una de las últimas grandes ofensivas de la Segunda Guerra Mundial.

Bernd Held tenía una cicatriz lívida que le cruzaba la frente cuando lo alcanzó un fragmento de metralla mientras defendía las colinas de Seelow durante los últimos días de la guerra. La Batalla de las Colinas de Seelow fue la acción defensiva final en el Frente antes Oriental de la Batalla de Berlín entre la Alemania Nazi y la Unión Soviética, que trajo como consecuencia directa la ruptura de la última línea de defensa previa a la ofensiva del Ejército Rojo sobre la capital del Reich. El ejército alemán había reforzado las colinas de Seelow, que daban al río Oder en su tramo más próximo a Berlín. No había esperanza. El puesto de socorro de Erik von Ulricht se encontraba en un pueblo situado a unos quinientos metros por detrás del frente. A primera hora del día siguiente, llevaron al hospital de campaña a Werner Franck. El frente había caído y Erik vio como Werner desaparecía, prisionero de guerra y comprendió que él también era un prisionero de guerra. Ambos fueron a campos soviéticos. Erik y Werner se contaban entre los millones de soldados alemanes que habían desaparecido. Casi tres millones de alemanes habían muerto en los combates del frente oriental a consecuencia del hambre, el frío y las enfermedades. Otros dos millones seguían con vida en los campos de trabajos forzados de la Unión Soviética. Algunos habían regresado, los que habían eludido a los guardias y a los que habían dejado marchar porque estaban demasiado enfermos para trabajar; todos ellos se habían sumado a los miles de desplazados abandonados a su suerte por toda Europa y que trataban de encontrar el modo de llegar a sus casas.

En el sur de Nuevo México, no muy lejos de El Paso, hay un desierto al que llaman la Jornada del Muerto, donde se estaba desarrollando el proyecto Manhattan probando el arma más mortífera que la especie humana había concebido jamás. Greg Peshkov estaba con los científicos, contemplando el experimento a nueve mil metros de distancia, en el búnker S-10000, que albergaba la sala de control. Junto a él estaba Wilhelm Frunze, un joven científico alemán y como la mayoría de los hombres de ciencia era radical, socialista y liberal. Además, creían que las verdades descubiertas por la ciencia pertenecían a la humanidad entera, y que no deberían mantenerse en secreto y al servicio de un solo régimen o país. La bomba estalló. Y Japón se rindió.

LA GUERRA FRÍA:

La Europa occidental había abrazado de forma definitiva la democracia, había espantado al comunismo con las tácticas amenazadoras del Kremlin y se había dejado comprar por los sobornos del Plan Marshall para su reconstrucción. La URSS ni siquiera había podido hacerse con el control de Berlín: como el puente aéreo había sido incesante, día tras día, durante casi un año, la URSS se había rendido y había reabierto las carreteras y vías férreas. En la Europa oriental, Iósif Stalin había conservado el control gracias a la fuerza bruta. Harry S. Truman había sido reelegido presidente, y se consideraba a sí mismo el líder mundial. Los estadounidenses habían acumulado un arsenal de armamento nuclear y tenían preparados bombarderos B-29 en Inglaterra, dispuestos a convertir la Unión Soviética en un desierto radiactivo. La guerra con Alemania había terminado, pero la Unión Soviética seguía maltrecha y empobrecida. Habían ganado la guerra y habían derrotado a Alemania. El 29 de agosto de 1949, Volodia Peshkov se encontraba en Kazajastán. Zoya Vorotsintsev y los demás científicos habían armado su primera bomba nuclear siguiendo el diseño que Volodia había conseguido gracias a Willi Frunze en Santa Fe, Nuevo México. La bomba explotó como esperaban, la URSS y EE.UU. volverían a estar en igualdad de condiciones. Cuando la Unión Soviética pudiera amenazar a Estados Unidos con la devastación nuclear, la dominación estadounidense tocaría a su fin. Los soviéticos estuvieron a la defensiva casi toda la guerra fría, a excepción del régimen de Nikita Jruschov, que llevó al extremo la amenaza nuclear como forma de presión para Estados Unidos.

Los nietos de las cinco familias, forjan sus destinos desde los años sesenta hasta los noventa del siglo XX: Dimitri Iliich Dvorkin era la mano derecha de Nikita Jrushchov. Al caer Jruschov, se convierte en asistente del presidente Alexei Kosiguin. En la Alemania Oriental, la policía secreta convocó a Rebecca Hoffmann en1961. Desde ese momento, que descubre que su marido Hans Hoffman trabaja para la Stasi, pasa a ser perseguida por este hasta huir a la Alemania Occidental con Bernd Held. Su hermano Walli Franck también se escapa a la Alemania Occidental.

Salir de la Alemania Oriental era cada vez más complicado: el Muro seguía creciendo en altura, longitud, y vigilancia. Al establecerse en Hamburgo, Walli Franck forma parte del grupo Plum Nellie donde está Dave Williams. En Estados Unidos, George Jakes colaboró siete años con Bobby Kennedy, se dedica a trabajar por los derechos civiles de los negros. Cameron Dewar trabaja por la candidatura de Richard Nixon. Al despedirlo del This Day en Washington Jasper Murray se va a Europa como corresponsal y en pantalla sale en directo desde Berlín para la televisión mostrando la caída del Muro de Berlín. El 4 de noviembre de 2008 George Jakes y su esposa Maria Summers ven en la televisión el discurso del nuevo presidente de Estados Unidos: Barack Obama.